La industria pesquera reclama bajar retenciones tras el anuncio de Caputo
El sector pesquero exige la reducción de retenciones y advierte que el 90% de su producción se exporta. Envió una carta a Caputo para recuperar competitividad.
La industria pesquera volvió a reclamar una rebaja de retenciones luego del anuncio del ministro de Economía, Luis Caputo, que dispuso una baja del 2% para cultivos agrícolas pero dejó nuevamente afuera al sector. El complejo pesquero —que exporta más del 90% de su producción y se considera una economía regional relegada— envió una carta al funcionario solicitando la eliminación de Derechos de Exportación y aranceles que, según advierten, afectan su competitividad, el empleo y la actividad en el litoral marítimo.
La Intercámaras de la Industria Pesquera señaló que mientras otras economías regionales recibieron alivio fiscal —como limones, arroz, maní, tabaco, legumbres, algodón, yerba mate, forestación, cadenas frutihortícolas, vitivinicultura, economía del conocimiento, minería del norte y el complejo petrolero-gasífero—, la pesca quedó excluida “por segunda vez”.
El sector recuerda que ya en abril había advertido que la industria perdió hasta USD 100 millones en exportaciones en un solo mes, en medio de la “más profunda crisis de la historia reciente”, marcada por precios internacionales bajos, altos costos de insumos, presión salarial y falta de diálogo con el Gobierno.
El listado difundido por Pesca y Puerto detalla que el langostino —afectado por una crisis prolongada y conflictos gremiales— tributa entre 1% y 9% según presentación: tail on de hasta un kilo paga 1%, envases grandes 3%, colas de dos kilos 3%, entero en cajas 6% y presentaciones con reprocesamiento hasta 9%.
La merluza hubbsi, en filet congelado en tierra hasta un kilo, tiene retención cero, pero envases mayores pagan 3%. El illex y las anillas no tributan, aunque el tubo limpio de un kilo paga 5%.
La Intercámaras insistió en que, con un consumo interno de apenas 5 a 6 kg por habitante al año, “cualquier impuesto afecta a la actividad” y limita la competitividad en mercados internacionales.
