Australia: investigan vínculos previos con ISIS del atacante más joven y endurecerán las leyes de armas
La policía confirmó que el hijo de 24 años había sido investigado en 2019 por presuntos lazos con ISIS, aunque fue exonerado. El ataque en Bondi Beach dejó 16 muertos y reabre el debate sobre la tenencia legal de armas.

Australia sigue conmocionada tras el atentado a balazos contra una celebración judía de Janucá en Bondi Beach, que dejó al menos 16 muertos y más de 40 heridos. Un día después del ataque, las autoridades confirmaron que uno de los agresores, el más joven, había sido investigado en el pasado por posibles vínculos con el grupo terrorista ISIS, aunque en ese momento fue descartado como amenaza.
El atacante sobreviviente es Naveed Akram, un estudiante paquistaní de 24 años, arrestado en el lugar y hospitalizado con heridas críticas. Su padre, Sajid Akram, de 50 años, fue abatido por la policía. Ambos utilizaron armas de fuego obtenidas legalmente. El padre contaba con licencia y tenía seis armas registradas, varias de las cuales fueron usadas en el ataque y luego recuperadas por las fuerzas de seguridad.
Según informó el primer ministro Anthony Albanese, Naveed Akram fue investigado por la agencia de inteligencia ASIO en 2019 durante seis meses, debido a presuntas conexiones con personas vinculadas a una célula del ISIS. “La evaluación determinó que no representaba una amenaza”, explicó. Sin embargo, tras el ataque, investigadores creen que los agresores habrían jurado lealtad al grupo terrorista y hallaron banderas del ISIS en su vehículo.
El gobierno australiano anunció que avanzará en un endurecimiento de la legislación sobre armas, con foco en mayores controles de antecedentes, restricciones a no ciudadanos y límites a los tipos de armas permitidas. El atentado es el más letal desde la masacre de Port Arthur en 1996 y vuelve a poner en debate el sistema de control de armas en el país.
