limitan las visitas a Cristina
Ahora, podrá recibir sólo a tres personas por dos horas, dos veces por semana.

El juez que controla la prisión domiciliaria de la ex presidenta definió un nuevo régimen de visitas. Lo hizo luego de que la propia Cristina difundiera en las redes sociales un encuentro con nueve economistas kirchneristas en su departamento de Constitución. Desde que está presa recibió a Lula Da Silva, a Estela de Carlotto y a una larga lista de dirigentes políticos con los que se junta casi de manera diaria, además de sus familiares y asistentes. También pasaron por su casa famosos como el cantautor cubano Silvio Rodríguez y Jorge Rial.
El juez federal Jorge Gorini, responsable de la ejecución de la condena del caso Vialidad, impuso -tal como anticipó Clarín- restricciones a las visitas que recibe Cristina Kirchner en San José 1111 donde cumple el arresto domiciliario por la condena de corrupción que pesa sobre ella.
Según estableció Gorini, no podrá recibir personas más de dos veces por semana y un máximo de tres personas por dos horas.
El punto de inflexión fue la fotografía que publicó esta semana la expresidenta en sus redes, rodeada de nueve personas, en la mesa del living del departamento que se constituyó desde junio de este año en su prisión domiciliaria.
“Establecer que las visitas a las que refiere el punto precedente deberán, en lo sucesivo, tener una duración máxima de dos (2) horas, que podrán concederse hasta dos (2) veces por semana y no podrán superar el límite de tres (3) personas concurrentes para cada ocasión”, sostiene el fallo al que accedió Clarín.
Minutos antes de la confirmación de las restricciones, la propia Cristina Kirchner salió en redes y aseguró que las críticas hacia ella no eran por la foto, sino por sus cuestionamientos al modelo económico de Javier Milei. E incluso recordó que ya había recibido a otros grupos de media docena de personas, sin tanta polémica.
El extenso texto titulado “No es la foto… es la Economía estúpido” fue publicado minutos antes de que se conociera la resolución judicial que restringe las visitas.
La ex mandataria se preguntó: “¿Cuál es el problema?” de recibir a este grupo de economistas. Afirmó a su vez que “estaban autorizados” por el juez que lleva adelante el cumplimiento de su condena. “No recibo a nadie sin previa autorización del Tribunal”, añadió.
Autorización, sin aclaraciones
Según explicaron fuentes judiciales, el abogado Carlos Beraldi había requerido autorización para que los economistas visiten a Cristina, pero no se especificó en el escrito que irían todos juntos para mantener una reunión en el departamento del barrio de Monserrat.
Las cosas cambiarán a partir de ahora. En el Tribunal aseguran que se estaba desnaturalizando el arresto domiciliario.
“Corresponde aclarar y reiterar que la visita de las nueve (9) personas que ingresaron al domicilio no había sido solicitada para que todas ellas concurrieran de manera simultánea, ni tampoco para participar de un encuentro colectivo”, explicó el juez Gorini en el fallo al que accedió Clarín.
Sobre esa reunión señaló: “La presencia concomitante de un grupo tan numeroso de personas excede los términos de la autorización requerida, así como el sentido común que subyace a la regla oportunamente impuesta, según
Para el juez, hubo falta de prudencia y de sentido común.
la cual, a excepción de un grupo reducido de personas allegadas –grupo familiar, profesionales médicos, representantes letrados–, todo ingreso de personas no incluidas en ese listado, debe ser expresamente solicitado y fundado”.
En otro tramo de su resolución, el juez Gorini expuso que la solicitud del ingreso a San José 1111, debe ser debidamente informado. Ante todo por razones de seguridad “pero sin obviar cuestiones inherentes al carácter de sanción penal que motiva el encierro de la interesada”.
La reunión realizada, explica la resolución “no sólo demuestra falta de prudencia sino que, además, desconoce la naturaleza punitiva de la prisión domiciliaria y desvirtúa los fines que inspiran esta modalidad de ejecución de la pena de prisión impuesta”.
Un encuentro de esta magnitud, con múltiples ingresos en forma simultánea, “no se compadece con la lógica de restricción que caracteriza este régimen excepcional”. Es decir: no se puede soslayar que Cristina Kirchner está presa en cumplimiento de una condena por corrupción.
El juez Gorini le hizo saber a Cristina Kirchner que, ante cualquier circunstancia que ponga en crisis el cumplimiento de las reglas impuestas en el arresto domiciliario y frente a estas nuevas restricciones, serán “revisadas en forma inmediata, adoptar medidas adicionales y, de corresponder, se podrá modificar o dejar sin efecto la modalidad domiciliaria”.
El arresto domiciliario de Cristina fue criticado por un sector del arco político pero sobre todo, por el fiscal general, Diego Luciani quien solicitó que vaya a una cárcel común para cumplir la pena.
En agosto, la ex presidenta presentó un recurso ante la Corte Suprema para evitar el uso de la to
