San Lorenzo volvió a quedar acéfalo y deberá convocar a elecciones anticipadas
La Comisión Directiva quedó sin conducción tras una ola de renuncias que dejó sin efecto la continuidad de Marcelo Moretti. Se llamará a una Asamblea Extraordinaria para fijar el calendario electoral y designar una comisión transitoria.

San Lorenzo atraviesa nuevamente un escenario de acefalía institucional. Luego de una extensa y tensa reunión de Comisión Directiva que se prolongó hasta la noche del martes en el Nuevo Gasómetro, se alcanzó el número de renuncias necesario para dejar sin conducción formal al club y poner fin a la gestión de Marcelo Moretti.
El presidente intentó resistir hasta último momento, respaldado por su vínculo con la AFA y por el argumento de que una acefalía podría derivar en una eventual intervención. Incluso horas antes había ratificado públicamente que no pensaba renunciar. Sin embargo, la presión interna y externa —con hinchas manifestándose en las inmediaciones del estadio— terminó inclinando la balanza.
La jornada estuvo marcada por episodios de alta tensión. Moretti declaró por la tarde en el Ministerio Público Fiscal porteño en el marco de una investigación por presunta “administración infiel” y por el incumplimiento de plazos judiciales en una convocatoria anterior de Comisión Directiva, anulada por irregularidades. Más tarde, ya en el estadio, fracasó un intento de acordar una licencia como alternativa a la acefalía.
Finalmente, la acumulación de dimisiones dejó al club sin autoridades ejecutivas. Solo siete dirigentes —entre ellos el propio Moretti y algunos vocales— no presentaron su renuncia, un número insuficiente para sostener la conducción.
Ahora, el presidente de la Asamblea y la mesa directiva de asambleístas deberán convocar a una Asamblea Extraordinaria para fijar la fecha de elecciones anticipadas, que por Estatuto no podrán realizarse antes de 90 días, y designar una Comisión Transitoria que administre el club en el período previo a los comicios. San Lorenzo vuelve así a una etapa de incertidumbre política en un contexto económico y judicial especialmente delicado.
