Hugo Moyano reacomoda el gremio y ubica a su hijo menor en un cargo clave
En medio de tensiones internas, Hugo Moyano fue reelecto en Camioneros y designó a su hijo menor, Jerónimo, como secretario Gremial, en un movimiento que generó fuertes cuestionamientos.

La Federación Nacional de Camioneros reeligió a Hugo Moyano como secretario general en un contexto de marcada inestabilidad interna. La novedad más significativa fue la designación de su hijo menor, Jerónimo Moyano, de 26 años, como secretario Gremial e Interior, un cargo estratégico que actúa como nexo entre las bases y la conducción, y participa en negociaciones durante conflictos sindicales.
La salida de Pedro Mariani, histórico dirigente que ocupaba el puesto desde los años 80, dejó un vacío que, según sectores del gremio, debía ser cubierto por un referente con mayor experiencia. La elección de Jerónimo generó cuestionamientos internos, donde algunos señalaron que “está verde” para asumir ese rol.
La interna familiar también atraviesa al sindicato. Pablo Moyano, secretario adjunto del gremio bonaerense y distanciado de su padre desde hace casi un año, no pisa la sede sindical. Mientras tanto, Jerónimo instaló su oficina en el séptimo piso del edificio, un espacio que, según quienes lo visitaron, tiene una estética más cercana a un penthouse que a una dependencia gremial.
El nuevo armado también consolidó a otros miembros del clan: Karina Moyano quedó a cargo de la Secretaría de la Mujer y Hugo (h) en Coordinación Jurídica. Facundo Moyano continúa controlando el sindicato de Peajes.
El reacomodamiento ocurre mientras Moyano enfrenta múltiples frentes: una interna abierta, conflictos salariales, reclamos de recolectores, una crisis en la obra social del gremio y una investigación judicial por presunta estafa en un hotel de Mar del Plata. En este escenario, la decisión de promover a su hijo menor es interpretada por varios sectores como un intento de preservar el control familiar de Camioneros.
