Presupuesto 2026: el Gobierno buscará superávit pese a las presiones opositoras
El Presupuesto 2026 prevé superávit, pero los proyectos aprobados en el Congreso agregarían casi 1% del PBI en gasto extra.

Un presupuesto bajo tensión política
El Gobierno ultima los detalles del Presupuesto 2026, que será presentado en los próximos días por Javier Milei en cadena nacional. El proyecto se elabora en medio de tensiones con la oposición y los gobernadores, luego de la aprobación de leyes que suman casi 1% del PBI en gasto adicional, lo que obligaría a un ajuste mayor al previsto.
El Ministerio de Economía ya definió proyecciones de recaudación, límites de endeudamiento y resultados fiscales. En la etapa final, el equipo económico busca blindar el superávit primario, en línea con los compromisos asumidos con el FMI.
La regla fiscal y el gasto público
El proyecto retomará la idea de una “regla fiscal” que ajuste partidas en caso de desvíos. Las jubilaciones quedarían fuera de ese esquema, ya que seguirán actualizándose por inflación. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), el 78,1% del gasto sería intocable y el 21,9% restante estaría sujeto a recortes, incluyendo programas sociales, subsidios y transferencias.
Sin embargo, el Gobierno enfrentará un desafío mayor: absorber el costo de leyes aprobadas en el Congreso como la de financiamiento universitario, ATN, combustibles y emergencia sanitaria. La consultora Macroview estima que implican un gasto extra de 0,85% del PBI.
El impacto de los compromisos fiscales
El FMI exige que en 2026 el superávit primario alcance al menos 2,2% del PBI, por encima del 1,6% de este año. Para cumplirlo, el oficialismo deberá profundizar el ajuste sobre el gasto no automático.
La Fundación Mediterránea proyecta que los ingresos crecerán solo 0,6% real en 2025, mientras que el gasto automático (como jubilaciones) aumentará 15% real en los últimos cinco meses. Para alcanzar la meta fiscal, las erogaciones discrecionales deberían caer hasta 14% anual real en ese período.
El ajuste ya se concentra en subsidios a la energía y transferencias a empresas públicas, con caídas del 56% y 41% interanual en los primeros siete meses del año. Mantener esa tendencia permitiría cumplir con la meta de 2025, pero complicaría aún más el punto de partida para 2026.
Claves de la discusión
- El Presupuesto 2026 incluirá una regla fiscal para sostener el superávit.
- El Congreso aprobó proyectos que suman casi 1% del PBI en gasto extra.
- El FMI exige que el superávit primario en 2026 llegue a 2,2% del PBI.
- El ajuste recaerá sobre subsidios, transferencias y programas no automáticos.
El debate parlamentario será decisivo: si la oposición insiste en avanzar con nuevas leyes de alto costo fiscal, el Gobierno necesitará ajustes más profundos para sostener el equilibrio de las cuentas públicas.