Grupo Albanesi entra en default por deuda de US$ 1.100 millones y abre proceso de reestructuración

El grupo Albanesi, uno de los principales actores del sector eléctrico en Argentina, confirmó ayer la mora en el pago de intereses de uno de sus bonos, lo que derivó en la declaración formal de default. La noticia se conoció tras cumplirse el plazo legal de 30 días otorgado para intentar resolver la situación de liquidez.
Las filiales Generación Mediterránea (GEMSA) y Central Térmica Roca informaron a la Comisión Nacional de Valores que “no se efectuó el pago de los intereses correspondientes”, configurando así un incumplimiento según las condiciones de las obligaciones negociables en cuestión.
El bono afectado, denominado Clase XXXIX (ticker MR390), fue emitido con vencimiento en 2031 y había captado la atención de inversores minoristas debido a un interés atractivo del 11% en dólares.
Desde Albanesi señalaron que, con el respaldo de asesores financieros y legales nacionales e internacionales, iniciaron un proceso de reordenamiento financiero destinado a adecuar la carga de sus compromisos a la generación de caja de sus operaciones. “Estamos evaluando diversas alternativas para resolver esta situación a la mayor brevedad posible, priorizando la continuidad operativa y la protección de los intereses de los acreedores”, indicaron, aunque sin aportar detalles concretos.
El grupo acumula una deuda total que supera los US$ 1.100 millones, incluyendo obligaciones en dólares y pesos, así como créditos bancarios. De ese monto, unos US$ 220 millones son de corto plazo.
Entre 2021 y 2024, Albanesi amplió significativamente su nivel de endeudamiento para financiar proyectos de expansión eléctrica, que no lograron completarse con la velocidad prevista. Si bien la puesta en marcha total de la Central Ezeiza en 2024 mejoró los resultados, fue insuficiente para evitar la crisis financiera.
Según Moody’s, la compañía debió aceptar pagos en bonos por parte de Cammesa, sin intereses y con quita, lo que incrementó sus necesidades de capital de trabajo y generó mayores costos financieros durante el primer semestre de 2024.
Los especialistas estiman que la negociación para la reestructuración de la deuda podría extenderse por al menos seis meses. Sin embargo, confían en que, si Albanesi opta por postergar vencimientos sin solicitar quitas de capital, podrá superar esta etapa, ya que el problema principal radica en la liquidez y no en la rentabilidad del negocio.
