El Gobierno admite que los dólares no salieron del colchón y promete medidas para generar confianza

A más de diez días del anuncio del Plan de Reparación Histórica de los Ahorros, el Gobierno nacional reconoció que aún no se ha logrado el efecto buscado: los dólares ahorrados fuera del sistema financiero siguen sin aparecer. Ni los bancos registraron un aumento de consultas, ni hubo señales claras de que los ahorristas hayan comenzado a volcar esos fondos al consumo. Pese a esto, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el director del Banco Central, Federico Furiase, defendieron la iniciativa y prometieron avances legislativos.
En declaraciones radiales, Furiase admitió que todavía “falta afinar los temas operativos” para que el nuevo régimen funcione plenamente, pero insistió en que se trata de una medida “muy importante para el crecimiento y la expansión del crédito”. Además, sostuvo que no se pueden esperar resultados inmediatos, y que el objetivo de fondo es remonetizar la economía en dólares, formalizar los ahorros informales y, con ello, mejorar la recaudación para sostener el superávit y reducir la presión impositiva.
Por su parte, Francos anunció que esta semana se presentará en el Congreso el proyecto de ley que busca “blindar” el nuevo esquema de regularización. Aseguró que el oficialismo confía en conseguir los votos necesarios y defendió el plan como una “oportunidad única para garantizar a los ahorristas que no tendrán que justificar el origen de sus dólares”. También remarcó que muchos de esos fondos “son blancos que se volvieron negros” tras ser comprados en el mercado paralelo.
No obstante, tributaristas y analistas advirtieron que las resoluciones publicadas hasta ahora no bastan para dar seguridad jurídica a quienes deseen ingresar sus ahorros al sistema. Sebastián Domínguez, especialista en temas fiscales, señaló que aún faltan cambios legales para asegurar que los adherentes no sean objeto de impuestos, sanciones o causas penales, y que las medidas en vigencia todavía no cumplen con ese objetivo.
En paralelo, se espera que el Ejecutivo cierre acuerdos con las provincias para evitar que los fiscos locales impongan gravámenes sobre quienes se sumen al nuevo régimen. La falta de definiciones claras y de un marco legal sólido ha sembrado dudas entre los ahorristas, y tanto en la City como entre especialistas coinciden en que el éxito del plan dependerá de que el Gobierno logre generar confianza real y garantías jurídicas concretas.