Cómo la policía logró que la alumna de 14 años entregue el arma
Una negociadora convenció a una estudiante de 14 años armada en Mendoza tras cinco horas de tensión. La alumna había dejado cartas a sus padres.

Cinco horas de tensión en la escuela
Un silencio estremecedor dominó la secundaria de La Paz, Mendoza, cuando una alumna de 14 años disparó con la pistola 9 milímetros de su padre, comisario en San Luis. Más de 200 estudiantes, docentes y administrativos fueron evacuados. La joven permaneció sentada, de espaldas a los negociadores, sin hablar durante más de tres horas.
La oficial Rocío Conti relató que la adolescente manipulaba el arma apuntando al piso, a su cara e incluso hacia los policías, aunque sin un gesto hostil. El comité de crisis decidió modificar la posición de los mediadores para poder hablarle de frente y avanzar con la negociación.
La entrega del arma y el abrazo final
La estrategia funcionó: tras insistirle en que soltara la pistola y la apartara con el pie, la joven finalmente la dejó en el piso a las 14.40. Un agente del Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros aseguró el arma y Conti pudo abrazar a la alumna.
Aunque al principio estaba alterada, la estudiante comenzó a calmarse con el acompañamiento de personal de salud. Conti la acompañó en la ambulancia hasta el hospital pediátrico Notti, donde siguió conversando con ella para contenerla.
El estado de salud de la estudiante
La adolescente permanece internada en sala común, estable y bajo tratamiento. Equipos de pediatría y salud mental la evalúan y acompañan.
Dos cartas que revelan la premeditación
Dentro de su mochila, los investigadores hallaron dos cartas escritas a mano para su madre y su padre. Aunque el contenido no trascendió, confirman que el hecho fue planificado y que pudo terminar en una tragedia mayor.
