Cáncer de colon: Argentina y Uruguay lideran los casos en la región y están entre los 15 países con más incidencia en el mundo

Cada año, más de 16.000 personas son diagnosticadas con cáncer colorrectal (CCR) en Argentina, una enfermedad que ya es la segunda causa de muerte por cáncer en el país, con más de 7.500 fallecimientos anuales. Junto a Uruguay, Argentina encabeza el ranking regional y figura en el top 15 global, según la base GLOBOCAN 2022 de la Organización Mundial de la Salud.
Los especialistas señalan que el alto consumo de carne roja y procesada —uno de los más altos del mundo—, combinado con hábitos urbanos poco saludables (sedentarismo, obesidad, alcohol y tabaco), explica en parte estas cifras. “Es el costo del estilo de vida occidental”, advierte Mariano Dioca, oncólogo del Instituto Roffo.
Aunque el cáncer colorrectal puede tener un origen hereditario, en el 80% de los casos aparece de forma esporádica, sin antecedentes familiares claros. Solo entre un 5 y 10% responde a síndromes genéticos como el de Lynch o la poliposis adenomatosa familiar (PAF), ambos con alto riesgo de desarrollar la enfermedad en edades tempranas.
Uno de los principales desafíos es la detección temprana. Más de la mitad de los diagnósticos se produce en estadios avanzados, lo que reduce drásticamente las posibilidades de curación. En estadios iniciales, la sobrevida supera el 90%; pero si hay metástasis, baja al 10%. Sin embargo, apenas el 20% de la población accede a estudios preventivos como colonoscopías o test de sangre oculta en materia fecal.
En el plano terapéutico, hay novedades: la ANMAT aprobó un tratamiento innovador que combina quimioterapia y terapia dirigida para pacientes con una mutación genética específica (BRAF V600E). El nuevo esquema mostró una reducción del 51% en el riesgo de muerte y del 47% en la progresión de la enfermedad, según datos presentados en la ASCO 2025.
Con la tendencia creciente de casos en personas jóvenes y el bajo nivel de control preventivo, los especialistas insisten: el cáncer de colon es prevenible y puede ser curable si se detecta a tiempo. El desafío, ahora, es cambiar hábitos y mejorar el acceso a los estudios de rutina.