Atentado en Colombia: el senador Miguel Uribe Turbay lucha por su vida tras ser baleado por un sicario de 15 años

Miguel Uribe Turbay, senador conservador colombiano de 39 años y precandidato presidencial del partido Centro Democrático, fue atacado a tiros el sábado durante un acto en Bogotá. El legislador recibió dos disparos —uno en la cabeza y otro en el torso— y permanece internado en estado crítico, con pronóstico reservado, en la clínica Fundación Santa Fe.
El atacante es un adolescente de 15 años que fue arrestado en el lugar por la policía luego de un tiroteo con los custodios de Uribe. El joven, que resultó herido en una pierna, estaba en posesión de una pistola semiautomática tipo Glock. El hecho recordó los métodos violentos de los carteles del narcotráfico de los años ’80 y ’90, como el de Medellín bajo el mando de Pablo Escobar, que reclutaban menores para cometer asesinatos.
La Fiscalía confirmó que, además de Uribe, otras dos personas resultaron heridas en el ataque, que fue captado por cámaras. El senador se encuentra en terapia intensiva tras una cirugía de emergencia. “Son horas críticas para que sobreviva”, expresó el alcalde de Bogotá, Carlos Galán.
La agresión provocó un inmediato repudio en todo el arco político colombiano. Miles de personas marcharon el domingo en las calles de Bogotá para condenar el atentado y expresar solidaridad con Uribe. También se pronunciaron expresidentes como Álvaro Uribe y César Gaviria, junto a políticos de todos los sectores y figuras públicas como Ingrid Betancourt, Juanes, Adriana Lucía y la banda Morat.
Desde el exterior, gobiernos de EE.UU., México, Chile, Uruguay, Argentina, Italia y Ecuador, entre otros, manifestaron su condena. La líder opositora venezolana María Corina Machado también expresó su apoyo.
La esposa del senador, María Claudia Tarazona, publicó un mensaje conmovedor en redes sociales: “Amor de mi vida, vuelve a mí”. En declaraciones posteriores agradeció la solidaridad y pidió continuar con las oraciones por la recuperación de su esposo: “Miguel sigue luchando fuertemente por su vida”.
Mientras tanto, más de cien agentes de investigación trabajan para determinar los móviles del ataque y establecer si hubo instigadores intelectuales. Aunque el uso de un sicario adolescente remite al accionar narco, no se descarta un trasfondo político, dado que Uribe competía en una interna con otros cuatro precandidatos para las elecciones presidenciales de mayo de 2026.
El atentado revive fantasmas de magnicidios pasados, como los de Carlos Pizarro y Bernardo Jaramillo Ossa en los 90, ambos cometidos por jóvenes sicarios que luego fueron ejecutados para eliminar testigos.
Uribe es nieto del expresidente Julio César Turbay (1978–1982) e hijo de la periodista Diana Turbay, secuestrada y asesinada por el narcotráfico en 1991. Su figura combina un legado político con una historia personal atravesada por la violencia narco, que ahora lo vuelve a alcanzar de forma brutal.